Todo el mundo ha tenido agujetas en alguna ocasión, sobre todo el día que vuelves a hacer ejercicio después de una etapa más bien sedentaria o cuando trabajas una nueva zona por primera vez. Pero ¿qué son realmente? ¿Se pueden evitar?
Tras un entrenamiento intenso, si eres una persona no acostumbrada a hacer ejercicio de forma habitual, puede ocurrir que se formen en la fibra muscular que has trabajado pequeñas lesiones de tamaño microscópico. Éstas son responsables de que el músculo se inflame. La inflamación sumada a las microroturas de las fibras produce una sensación dolorosa cuando mueves la zona afectada. No te preocupes, tener agujetas no es grave y suelen durar poco pero tampoco es una señal de que has trabajado bien ni de que tus músculos están creciendo debido al esfuerzo físico realizado.
Es más, si estás acostumbrado a ejercitarte y normalmente después de tus entrenamientos tienes agujetas, posiblemente no estás haciendo las cosas bien en tus sesiones. Las agujetas, como hemos dicho, aparecen cuando ejercitas grupos musculares nuevos o en los que no sueles centrarte. Pero para conseguir mejoras físicas tienen que entrar en juego lo que se llama “células satélite”, que son las responsables de corregir los daños causados por el entrenamiento. Cuando llevas un tiempo trabajando una zona, con una carga e intensidad adecuadas, estas células empiezan a actuar y se movilizan para reparar las micro-roturas que se puedan producir en el músculo. En este caso, crece la sección muscular gracias a la hiperplasia, el aumento de células de un órgano o tejido).
Hay que tener un poco de paciencia cuando aparecen las agujetas porque en algunos casos tardan varios días en irse. Para colaborar en la recuperación puedes darte baños de contraste (agua caliente y fría) para activar la circulación en la zona. Además, puedes masajear la zona con aceite o hacerte suaves friegas y, si el dolor no es muy elevado, puedes continuar haciendo ejercicio de forma suave.
Para evitar que aparezcan, planifica bien tu entrenamiento, empezando por ejercicios concéntricos hasta los excéntricos. Recuerda que no son un “premio” por lo que has trabajado así que lo importante, cuando te pongas tus pantalones de fitness AppleSkin y vayas decidido a darlo todo en el gimnasio, es que te lo tomes con calma y vayas aumentando la intensidad y las cargas poco a poco.