No existe un acuerdo general sobre la cantidad de agua que hay que beber al día. Dependiendo de con quién lo consultes la cantidad suele variar entre uno y dos litros. Lo cierto es que beber agua e hidratarse bien es vital, una acción muy sencilla que hará que te sientas mucho mejor.
Lo primero es entender de qué se ocupa el agua en tu cuerpo. Sus funciones son: regular tu temperatura corporal, acompañar a los productos de desecho que acumulamos en el cuerpo (orina) y permitir el metabolismo celular.
El cuerpo del ser humano está compuesto alrededor de un 70% de agua y diariamente, sin practicar deporte o hacer un esfuerzo extra se pierden entre 2 y 2 litros y medio. ¡Imagina si haces ejercicio!
Por eso, es lógico pensar que el agua que debemos tomar diariamente está relacionada con el gasto que tenemos de la misma. La referencia está en que necesitamos alrededor de 100cc de agua por cada 100 calorías que consumimos. De ahí, que seguramente hayas leído o escuchado en muchos sitios que se debe beber aproximadamente dos litros de agua diarios porque se entiende que un gasto normal es de 2.000 calorías.
A veces podemos pensar que no hay forma de beber tanto agua en un día, pero quizá estemos tomándola sin darnos cuenta ya que el agua también se obtiene de los alimentos, muchas frutas y verduras están compuestas en su mayoría de agua y también son una fuente de consumo. También la leche o los zumos llevan agua. ¿A qué así no te parece que sea tan complicado llegar al nivel?
Si, aún así, crees que tomas poco agua al día, intenta tener siempre cerca una botella o un vaso lleno de agua mientras trabajas, junto a tu cama ¡y por supuesto en el gimnasio! A veces, cuando estamos muy concentrados con nuestras cosas no nos damos cuenta del tiempo que llevamos sin beber.
Además, hidratarse es muy importante para tener un aspecto saludable en la piel y para combatir la retención de líquidos, una de las principales causas de celulitis. El combo hidratación, dieta sana, ejercicio y pantalones anticelulíticos AppleSkin es perfecto para dejar KO a la piel de naranja.