De entre el 70 por ciento de mujeres que hacen régimen cada año, el 30 por ciento tiene un peso correcto. Y es que no es lo mismo adelgazar que tonificar y, a veces, potenciar lo segundo es lo que necesitas para tener un cuerpo más esbelto.A la hora de ponerte a practicar ejercicio tienes que plantearte si lo que quieres es perder grasa o endurecer tu cuerpo. Las actividades aeróbicas como correr o nadar son ideales para eliminar esos kilos que te sobran pero es posible que tu problema no sea de peso, sino de flacidez. Para ello lo mejor es un entrenamiento de tonificación, para endurecer zonas localizadas de tu cuerpo, además de reducir la celulitis.
Muchas mujeres piensan que con los ejercicios de tonificación se desarrolla mucho músculo, lo que para algunas resulta muy poco estético. Lo cierto es que para ello son necesarias muchas horas de entrenamiento y mucha dedicación, pero con un ejercicio moderado se consigue moldear el cuerpo y ganar en fuerza corporal.
Como ya sabes, uno de los pilares básicos para reducir la celulitis es seguir una rutina de ejercicios adecuada y los de tonificación son un buen complemento al trabajo aeróbico. De esta manera, la piel coge firmeza y se minimizan los hoyuelos que forman la piel de naranja.
Dependiendo de qué parte de tu cuerpo quieres tonificar, te proponemos una serie de rutinas. Esto es lo que se conoce como fitness localizado.
PIERNAS:
El ejercicio más común es hacer sentadillas, desde una posición erguida, flexiona las rodillas y cadera para hacer bajar el cuerpo hacia el suelo pero sin doblar la cintura ni perder verticalidad y volver a una posición erguida. Pero también existen las zancadas, que consisten en colocarnos de pie con las piernas ligeramente separada y, manteniendo la espalda recta, dar zancadas con la pierna derecha e izquierda de forma alternativa. Cuando avanzamos una pierna, la otra se queda detrás, un poco flexionada (sin llegar al suelo). Este ejercicio es perfecto para reforzar las rodillas. También podemos utilizar un step y simular el movimiento que hacemos cuando subimos escaleras.
GLÚTEOS:
Para moldear los glúteos, lo mejor es que te coloques a cuatro patas en el suelo, con las rodillas apoyadas y las palmas de las manos también. Mueve las piernas hacia atrás y hacia arriba formando un ángulo de 90º. Haz quince repeticiones con cada pierna.
BRAZOS:
Las flexiones son perfectas para tonificar nuestros brazos. Para realizarlas correctamente pondremos nuestras manos de forma que, cuando las apoyemos en el suelo formen un triángulo (los pulgares serían la base). Podemos hacer las flexiones con las rodillas apoyadas en el suelo, son igual de efectivas. Si vemos que nos cuesta mucho trabajo, podemos apoyarnos en el borde de la cama o de un sofá y, con el cuerpo recto hacer un movimiento de subida y bajada. Las pesas también ayudan a tonificar tus brazos ¡pero no te pases con el peso!
PECHO:
Para mantener el pecho firme, un ejercicio que funciona es coger un par de pesas, o si no tienes, dos botellas de agua o algo similar y, tumbada boca arriba y con las piernas flexionadas, coloca los brazos formando un ángulo de 90º, estíralos y vuelve a flexionarlos. Repite diez veces con cada brazo.
Es muy recomendable que, mientras hagas estos ejercicios, uses tus mallas Appleskin, anticelulíticas y con efecto adelgazante, pensadas para ser tu mejor complemento mientras haces deporte. Y recuerda, antes de ponerte a hacer ejercicio piensa en qué es lo que más te conviene.